-MÁXIMO 15 ALUMNOS POR CLASE

-EXHIBICIÓN EN PÁGINAS WEB DE LOS TRABAJOS QUE SE HAGAN DURANTE EL TALLER.
-COMO DISTRIBUIR EL MATERIAL REALIZADO.

Para explicar a una persona, tenga o no experiencia cinematográfica, como se escribe un guión bastan diez minutos. Como es natural esos diez minutos se pueden alargar, sin mayor dificultad, en cinco cursos de nueve meses cada uno y dos horas a la semana.
En el taller LO QUE HAY lo que se pretende, y hasta la fecha se ha logrado siempre, es enfrentar al alumno con una historia, simple o compleja según su situación y deseos, y a continuación que la ruede, la monte y tenga una copia final para enseñar a los amigos o exhibir en Youtube o presentar a festivales.
Basta un teléfono móvil o una cámara de fotos que grabe video para rodar hoy día una película, y se puede hacer con presupuesto cero. Cero absoluto. Por supuesto que el dinero es imprescindible para muchos proyectos, para completar las carencias de cada uno si quiere llegar más allá de sus propios límites. Pero el exceso de dinero puede ahogar, como el exceso de agua, una idea genial.
En LO QUE HAY partimos del principio que el cine es suma de inteligencias. Y que aunque es una industria también es un medio de creación y realización personal cada vez más cercano al proceso de la escritura. Sencillísimo y al alcance de cualquiera.
En el primer trimestre lo único que pretendo es que los alumnos no se caigan, que aprendan a andar -hacer cine- sin juzgarse. En el segundo ya sabrán correr, rodar. Y en el tercero, si así lo desean, podrán presentarse ante el mundo -sea su mundo el mercado cinematográfico o su familia o un grupo de amigos- como cineastas.
El alumno convencional de un taller espera que se le ofrezca un programa, siempre más o menos falso, una lista de objetivos plagada de lugares comunes y una lista de lecturas recomendadas. Personalmente prefiero escuchar y aprender de lo que mis alumnos tienen en su interior; y lo único que hago es apoyarlos con lo que sé y lo mejor de mi energía y de mí mismo. A vivir se aprende viviendo. A hacer cine se aprende haciéndolo. Y cualquiera puede hacerlo, como demostramos en este taller, a su propio modo, con lo que tenga y el apoyo del director del taller. En suma, con lo que hay.

	Horarios
	Lugar
	Precios y modo de inscripción
	Funcionamiento del curso: objetivos
	Metodología

HORARIO: De 15:00 a 17.:00, una clase por semana: los jueves.
12 sesiones de dos horas por trimestre. 36 clases la travesía completa.

LUGAR: En la Piscifacoría, situada en el barrio de Malasaña.

PRECIO Y CONTACTO: 95 euros al mes, más 40 de matrícula. A quien pague el taller por adelantado -un trimestre o el curso completo- no se lo cobrará matrícula.Basta con mandar un mail al profesor,escribiendo a javierpuebla seguido del clásico @javierpuebla.com o ponerse telefónicamente en contacto con Javier Puebla en el teléfono: seis cinco nueve dos cuatro cuatro tres ocho cero.(lo pongo así para esquivar a las arañas de internet, sorry). También se puede acudir directamente a la PISCIFACTORIA.

OBJETIVOS: Crear, como mínimo, un cortometraje por trimestre.
Perder el miedo, el respeto incluso, a la técnica cinematográfica. Disfrutar de la parte lúdica -no hay nada más divertido en el mundo que un rodaje- y potenciar la capacidad creativa. Aprender a sumar inteligencias, que es la clave del cine.
No es necesaria ninguna experiencia como cineasta y puede seguir el seminario cualquier persona que quiera encontrar al creador que -garantizo- lleva dentro.

METODOLOGÍA:
El método CON LO QUE HAY enseña que para hacer cine sóo hay que querer hacer cine. Es aún más fácil que escribir un cuento.La filosofía es utilizar la práctica de la experiencia para, sobre la misma, explicar la teoría. Se aprende mucho más a partir de un texto cualquiera escrito por el propio alumno que leyendo y comentando a los autores consagrados. Las concomitancias y puntos de encuentro con los grandes y pequeños cineastas, que existirán siempre y se dan de modo espontáneo, serán señaladas por el profesor, quien también sugerirá bibliografía de acompañamiento, y aportará ejemplos.

No hay nada más divertido que rodar una película. Ni siquiera..., ni siquiea eso...

"No es a mí a quien le gusta el cine, sino al cine a quien le gusto yo"
IVAN ZULUETA. Arrebato.