EDITANDO A
JORGE HERRALDE
Lo que sigue es el discurso
de Herralde con motivo de la inauguración de la
librería Central en Mad Madrid. No me cabía
en los tres mil cien caracteres de los que dispongo, por
lo que he tenido que extractarlo y editarlo. Editando
a Jorge Herralde. Tendrán que reconocerme
que “tengo huevos”. Sólo espero que
Jorge no me los corte. cuando vea mi edición de
sus palabras.
“Esta gran librería es el fruto de la conjunción
entre La Central, que nació
en Barcelona en 1995 y las de Feltrinelli,
que datan, creo, de 1957 y ascienden ahora a 106 o quizá
107, la velocidad de crucero es endiablada. La de Feltrinelli
es una experiencia singular, quizá única
en Europa, de una potente editorial con una potentísima
red de librerías que han tenido una importancia
capital para la cultura y desde luego para las editoriales.
La Central es un claro ejemplo de la similitud entre la
edición y la librería vocacionales. La forma
de escoger o excluir y de enaltecer determinados autores,
títulos, tendencias culturales es muy similar a
la configuración de un catálogo editorial
y las estrategias para su visibilidad. Esta determinación
persistente, tenaz y siempre con las antenas desplegadas,
es lo que conforma su identidad.
La Central no es la única con estas características,
hay muchas otras: Antonio Machado,
o Laie, por citar alguna; son
más que una librería y actúan como
activos agentes culturales, produciendo reiteradamente
el efecto serendipity. Es decir, no sólo
encuentras en ellas los libros que buscabas, sino que
el visitante curioso, de repente, se topa con libros impensables,
a menudo de escritores semisecretos, o con libros muy
minoritarios pero fundamentales, o rarezas de pequeños
y vivaces sellos editoriales. A mí me ha pasado
en La Central en muchas ocasiones, y estos hallazgos inesperados
mientras buscas otras cosas, que parecen pura serendipity,
o dicho en castizo pura chiripa, obedecen en realidad
a una política librera sabia y frondosamente planificada.
Carlo Feltrinelli, al frente desde hace
muchos años de la editorial y de las librerías,
recuerda en su libro Senior Service que la consigna era
inducir a toda costa a que la gente comprara libros, y
así, desde los inicios, se estudió rigurosamente
la localización precisa de las librerías
y la innovación constante: el sobresalto provocado
en la librería Feltrinelli de Roma en la que los
adolescentes se arracimaban en torno a una jukebox,
atentos a la música de la jukebox, pero
entre libros. Continuas innovaciones y reajustes, hasta
ahora mismo aquí en Madrid, con esta espléndida
librería que nos procura a la vez sosiego y exaltación,
algo aparentemente contradictorio, pero que no lo es:
el sosiego al entrar en un territorio acogedor, civilizado
e imaginativo y la exaltación ante sus propuestas
lectoras.
Agradecer a Antonio Ramírez y
Marta Ramoneda esta exhibición
de “optimismo de la voluntad”, tan atípico
hoy y por ello más necesario que nunca. Os deseo
que contéis con toda la suerte precisa, ya que
la profesionalidad y la imaginación están
ya sobradamente demostradas.”
JORGE HERRALDE.
javierpuebla-arroba-javierpuebla.com
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