JAVIER PUEBLA

                     

CON FLORES A MARÍAS, TENDENCIA FERNANDO

En algún artículo o libro del genial Rafael Reig, creo que en MANUAL DE LITERATURA PARA CANÍBALES (pero no me hagan mucho caso), el único enfant terrible de nuestras letras, el mejor escritor satírico en activo, se choteaba alegre y desenfadadamente de Marías, Javier Marías, y dibujaba una escena bucólica en la que Almudena Grandes y Juan Benet corrían por campos ingrávidos como la superficie de la luna cargados de flores para el autor de MAÑANA EN LA BATALLA PIENSA EN MÍ, CORAZÓN TAN BLANCO o TODAS LAS ALMAS (sus mejores obras, in my humble opinion). Decía también en el mencionado artículo o capítulo, que creo recordar se titulaba la guerra de los Marías, que él se decantaba por la tendencia Fernando, es decir: la que encabeza Fernando Marías; para mayor claridad y poder entendernos: el que no es hijo del sabio, generoso y voluntariamente humilde filósofo Julián Marías). Pues bien, el destino o las estaciones o el tiempo o el departamento Ámbito Cultural del Corte Inglés han querido dar la razón a Rafael Reig, o dejar en tablas -de momento- la guerra de los Marías, porque a Fernando Marías, premio Nadal con EL NIÑO DE LOS CORONELES, premio Ateneo de Sevilla con EL MUNDO SE ACABA TODOS LOS DÍAS (mi novela favorita entre las suyas), le han dado otro premio, de lo más florido, económica y estacionalmente: el premio PRIMAVERA que conceden al alimón Ámbito Cultural de El Corte Inglés y Ediciones Espasa.
Fernando Marías y uno de los editores que más le han apoyado, quizá el que más: Miguel Ángel Matellanes.Me había encontrado con Fernando hace unas semanas, precisamente en un acto organizado por Ámbito Cultural y con motivo de la presentación de YO LLORÉ CON TERMINATOR 2 de Carlos Salem, y me comentó que tenía nueva novela terminada y, dado que la consideraba su mejor trabajo hasta la fecha, la estaba haciendo bailar sobre la mesa de cuantos editores conocía con la esperanza de que alguno se enamorase de ella. Lo consiguió, Rosa Semprún -o quizá Ramón Pernas- recibió el flechazo y ahora Fernando Marías recibirá doscientos mil euros a cambio de comerse una promo de las más duras que conoce nuestra literatura (“a una persona de poca salud, la mataría”, me comentó en su momento Antonio Soler, que ya había ganado, y promocionado, el premio). Nada más enterarme, dos días más tarde (soy un despistado crónico) mandé un sms a Fernando. Busco y copio. Encontrado. Ahí va. “Estoy impresionado. Felicidades por el premio. Me quito el sombrero. Javier”. Su inmediata respuesta: “La verdad, yo también!!”. Hasta el más ardiente defensor de Javier en la guerra de los Marías tendrá que admitir que Javier Marías difícilmente sería capaz de una respuesta tan simpática (lean FIEBRE Y LANZA). Reitero mis felicitaciones, le mando flores ya desde esta atalaya, y hago extensivo las felicitaciones primaveras a la flamante Comisario de la Expo en Shanghai, María Tena, la gentil María Tena, que ha quedado finalista. Pero mientras llega la primavera BLACK, BLACK, BLACK de Marta Sanz. Rafael Reig, omnipresente, dice maravillas de la novela en su columna de ABC Cultural. Estoy deseando tener Black, black, black entre las manos; deseando leerla.

Fernando Marías y Javier Puebla, en Sevilla

 

 

 

 

 

 

 

 
 

 

 

 

Javier Puebla-La inutilidad de un beso. Segunda entrega de LA TRILOGIA DE EL TIGRE. Kafkiana, rara y -quizá- hasta genial.

Javier Puebla

Javier Puebla firmó la primera obra de mister Frederic Traum. Al parecer tiene amigos bastante poco recomendables

   
   
       
Carpe diem, visitante nº Que los hados guíen tus pasos